Tenemos
claro que queremos escribir una novela. Y no cualquier novela, la mejor novela
de la historia. Y será la mejor porque es la nuestra. Todas las madres creen
que su hijo es el más guapo. Así pues, como hijo nuestro que va a ser esta
novela, será encumbrado de los mimos más cálidos que podamos otorgarle.
Escribir
es algo que va muy dentro de cada uno. Es una afición muy subjetiva en la que
el estilo propio se va moldeando con la experiencia. No hay que impacientarse,
todo el mundo acaba encontrando su estilo. He escrito muchas cosas que he
descartado porque no me convencían. Suele pasar. No pasa nada, nadie dijo que
esto fuera fácil.
Para
este proyecto lo primero que he hecho es meditar sobre el género que me
gustaría escribir. Me ha sido fácil decidirme puesto que soy amante de la
fantasía y sé que es donde más cómodo me voy a encontrar.
La
fantasía alberga un gran abanico de posibilidades. Por ejemplo, a mí me gusta
mucho el terror, que puede estar englobado dentro de la fantasía si tenemos en
cuenta que el causante del miedo en una historia puede venir de un origen
sobrenatural. Pero no sé si estaría cómodo escribiendo algo de terror. Al menos
de momento. Aterrar a un lector puede ser muy difícil. Bueno, hay quien puede
aterrarse con facilidad cuando entra a una librería y ve un libro de Belén Esteban entre los más
vendidos, pero no me refiero a esa clase de terror. Despertar los sentimientos
más oscuros de la gente es bastante complicado. Stephen King es un maestro
haciéndolo, yo sólo soy un simple alumno. No descarto escribir alguna novela
sobre ello, pero cuando tenga algo más de rodaje.
Me he
decantado más por la posibilidad de crear un mundo en el que controle todas las
variables. Como matemático no me gusta dejar cabos sueltos. Si yo soy el todopoderoso
creador de mi mundo no habrá nada que se escape de mi voluntad.

Es cierto que crear un mundo desde cero tampoco es tarea fácil. Pero no me importa porque estoy convencido de que disfrutaré jugando a ser Dios con mis personajes.
En
realidad, no hay un ámbito sencillo sobre el que construir los cimientos de una
historia. Todos tienen sus complejidades, por ello creo que buscar comodidad es
algo indispensable. Si nos metemos a escribir en un género con el que no
terminemos de estar cómodos, es muy posible que acabemos por dejarnos la obra a
mitad. Lo cual sería una pena, todas las historias se merecen un final.
Si tú
también tienes claro el género con el que quieres entrar en materia no tengo
nada más que añadir.
Pero
quizás aún no tengas uno definido. O estés dudando entre varios. No pasa nada.
Dudar es bueno, nos hace pensar. Hay que dudar de todo cuanto nos rodea. Ya lo
dijo nuestro colega Descartes. Y aquel hombre sabía pensar.
Revisa
los libros que te has leído, seguro que hay un tipo de novela que sobresale por
encima de las demás. Puede ser que te guste escribir sobre la temática de la
que iba aquel libro tan apasionante que leíste y con el que tanto disfrutaste.
Recuerda que lo que quieres es buscar comodidad, y la comodidad va relacionada
con tus gustos.
Escribe
acerca de lo que te gusta y los momentos de frustración serán más llevaderos.
Porque debes saber que esos momentos vendrán a por todos nosotros cuando menos
lo esperemos. Pero convéncete
de que saldremos victoriosos de ellos y nos harán más fuertes.
Puede
que la duda al elegir entre dos géneros comience a ponerse pesada de más. No te
ofusques con eso. Lo mejor es que pienses en ideas acerca de las que te
gustaría escribir. Ellas solas te guiarán y te ayudarán a encaminar el marco de tu novela. Reúne
esas ideas, puntúalas, elabora un ranking. Seguro que habrá una ganadora.
Si aún
así no estás convencido, es porque tienes muchos géneros con los que podrías
lidiar desde el principio. ¡Enhorabuena!
"Escribe acerca de lo que te gusta y los momentos de frustración serán más llevaderos". Por supuesto siempre hay un genero que nos apasiona. A mi me gusta el cine y la trayectoria de grandes estrellas. Decidí escribir una novela sobre Marilyn Monroe. Es una luminaria que ha sobrevivido después de muerta. No encontré jamás una novela sobre su vida y muerte. Hay biografías, reseñas, ensayos, documentales, películas, etc. Yo quería leer una historia que dijera que no se suicidó sino que la mataron. No lo encontré. Hace mucho leí: "Cuando busques un libro y no lo encuentres ese libro lo debes escribir tú". Puse manos a la obra después de una ardua investigación y surgió: "El rostro oculto de Marilyn".
ResponderEliminarUna idea muy interesante. Escribir una novela, sea del género que sea, lleva un trabajo previo de investigación y documentación. En tu caso dicho trabajo es muy importante ya que está basada en un personaje tan relevante como Marilyn. Estoy convencido que al ser uno de los campos que te apasiona, ese proceso ha sido tan gratificante como su posterior escritura.
EliminarMucha suerte con ello.